Skip to content

Cuando Elna perdió un diente

cuento de Cuando Elna perdió un diente

El cuento de Cuando Elna perdió un diente

Elna tenía seis años y una sonrisa que siempre iluminaba todo el aula. Hacía días que notaba un dientecillo que se movía un poco cuando comía galletas o cuando se lavaba los dientes. Al principio le dolía un poco de gracia, pero también un poco de miedo: “¿Y si duele cuando cae?”, pensaba.

Una noche, mientras cenaba, el diente se despegó por completo y cayó en su mano. Elna abrió unos ojos redondos y gritó: —¡Mamá! ¡Papa! ¡Me ha caído el diente!

Los padres la abrazaron y le dijeron que aquello era una señal de que se estaba haciendo mayor. Elna se miró en el espejo y, a pesar de ver el agujerito en la boca, se sintió muy valiente.

Aquella noche, antes de acostarse, puso el diente bajo la almohada. Le latía el corazón de la emoción. No podía dejar de preguntarse si vendría Ratón Pérez.

Cuando se durmió, soñó que su diente se convertía en una estrella pequeña que volaba por el cielo. La estrella le decía: —¡Gracias por cuidarme tanto! Ahora me convertiré en luz para que puedas soñar bonito todas las noches.

Al día siguiente, Elna despertó y corrió a mirar bajo la almohada. ¡El diente ya no estaba! En su lugar había una moneda brillante y una nota que decía: “Para Elna, que es valiente, alegre y tiene una preciosa sonrisa.”

Elna saltó de alegría y enseñó la nota a toda la familia. Y ese día comprendió que perder un diente no era motivo de miedo, sino un paso maravilloso hacia crecer.

Y así, con un agujerito simpático en la boca y el corazón lleno de felicidad, Elna descubrió que cada cambio trae una nueva sorpresa y que las cosas pequeñas pueden ser muy mágicas.

FIN

¿Te ha gustado el cuento? ¡Dínoslo!

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Puntuación media: 0. Votos totales: 0.

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este cuento.

Descarga el cuento de «Cuando Elna perdió un diente» en PDF

Vuelve a leer el cuento de Cuando Elna perdió un diente

Buscar